Publicada en Mavirock Revista #33, Edición histórica.
La historia del arte de tapa de algunas de las obras más significativas de la historia del rock local. (Segunda parte)
El álbum que comienza con un solo de batería ejecutado por Luis Gambolini en la intro de “Tren de las 16”, el magnífico tema que da inicio a PAPPO’S BLUES VOLUMEN 2, fue grabado en los estudios Fonal y publicado por la discográfica Music Hall, en 1972. Los créditos como compositor, autor, director orquestal e intérprete son todos para Norberto Aníbal Napolitano, Pappo, que con apenas 21 años acababa de regresar de Inglaterra tentado por las buenas ventas del primer disco de la banda.
Black Amaya y David Lebón, que habían integrado la primera formación del grupo, ya encaraban otros proyectos: Pescado Rabioso y Color Humano. Pero Pappo avanzó con el segundo LP y los convocó para tocar algunas canciones como invitados. Dice Black que el Carpo no era un tipo de consultar sus ideas. “Pappo hacía las cosas solo, él arreglaba todo. Con nosotros tenía otro tipo de acercamiento más de amigo”.
El diseño del arte de tapa del “disco de los ratoncitos (Pappo sic)” fue ideado por Juan Oreste Gatti, el artista responsable de portadas memorables de la época como ARTAUD (Luis Alberto Spinetta, 1973) y CRUCIS (Crucis, 1976), entre otras, que años más tarde terminaría en Madrid diseñando la gráfica de casi todas las películas de Pedro Almodóvar. En los setenta, Gatti conoció a Jorge Álvarez, fundador del sello Mandioca y propulsor del rock argentino, por medio de Daniel Melgarejo, también ilustrador y diseñador del movimiento. “Melga fue el que trajo la onda de comic al rock. Algo impensable en esa época y, de alguna manera, revolucionario”, explica Ada Moreno, fotógrafa de la discográfica Microfón y amiga cercana de ambos dibujantes. “En ese tiempo Gatti todavía estaba muy influenciado por él, era su fan”.
Inspirado en su predecesor, que años más tarde continuaría su carrera en Disney, Gatti dibujó entonces para PAPPO’S BLUES VOLUMEN 2 esa tapa naif con ilustraciones de colores vivos y criaturas avispadas tocando el arpa y el violín a la luz de una luna llena y redonda. “Gatti hacía las tapas de una -dice Ada-, nunca presentaba proyectos a los músicos. Escuchaba los temas, fumaba un porro y dibujaba. Y Pappo era un tipo simple y le pareció que el diseño iba bien como para descontracturar la rigidez del momento”.
El país respiraba aires represivos bajo el último año de la dictadura militar autodenominada Revolución Argentina. “Nosotros les estábamos esquivando las balas a los milicos. No porque estuviésemos en una lucha, la nuestra era más bien hacer lo mejor posible por la música. Y divertirnos”, explica la fotógrafa de Microfón, entonces también pareja de Billy Bond.
Era 1972, Álvarez había sido contratado como ejecutivo de la discográfica y había nombrado director de arte a Gatti, que por entonces era un joven de 22 años. La generación de músicos y artistas que formaron el movimiento fundacional del rock argentino se estaba afianzando. “Nunca pensamos que estábamos haciendo algo que se iba a transformar en lo que se transformó”, dijo Gatti en una entrevista publicada en Página/12. “Nosotros tomábamos caña a la vuelta de Microfón, leyendo a Vampirella y Creepy, y haciendo todo tipo de gamberradas. Y dentro del grupo había subgrupos. Los de Luis Alberto Spinetta que eran más serios, los de Arco Iris que eran más místicos y vivían en comunidad. Yo era del grupo de los peores del colegio, que eran Billy Bond, Pappo, Pinchevsky. Fui el primer homosexual y me aceptaron sin dramas. Imaginate con Pappo, que era terrible, y en esa época fuimos muy cómplices”, explicó el dibujante.
En el interior del disco una imagen en blanco y negro del Carpo punteando su Gibson SG frente a un micrófono contrasta con el resto de la estética del álbum. “En esa foto estaba enyesado”, recuerda Black entre risas. “Había tenido un accidente con el cantante del Trío Galleta, Carlos Iturbide, en un Citroën, manejando por Mar del Plata. Cuando dieron la vuelta para caer en la Playa Bristol, siguieron de largo y ¿viste que el Citroën es una lata?, ¡se quebró la pierna en tres partes!”
“En ese momento se estaba inventando todo”, dijo Gatti. “Yo no había hecho nunca una portada, los chicos tampoco habían hecho antes un grupo de rock. Todo se inventó en esos años”.
Leer primera parte / ARTAUD, Luis Alberto Spinetta acá
Leer tercera parte / MANAL, Manal acá
manuelacastroweb.wordpress.com 